Tengo un Volvo desde hace 4 años y desde hace tiempo confío el mantenimiento de mi coche en Gresalba, un taller oficial de la marca en Madrid que cuida mi coche como verdaderamente se merece y con gran profesionalidad.
A menudo me solían decir que fuera a talleres de toda la vida, que te ahorras dinero, etc. Lo cierto es que aquí me tratan muy bien y quedo contento de todas las revisiones que paso (y son unas cuantas ya que soy comercial y viajo mucho). Aunque uno cuide el coche, ya sabemos que, de no tratarlos bien, podemos tener problemas.
Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, vamos a darte unos consejillos para que tu coche puede durarte unos años más, que nunca sobran ¿no?
- Trátalo suavemente cuando esté frío: No debes elevar las revoluciones del motor cuando la temperatura del vehículo esté baja. Por ejemplo, cuando se arranca por la mañana, no debes de exprimir el motor, ya que se pueden desgastar de manera rápida todas las partes de dentro del motor. Tu vehículo, lo mismo que si fuera un atleta, debe calentar antes de dar lo mejor de sí. Es recomendable fijarse en la temperatura del agua para que suba de vueltas con más alegría. Si tu coche tiene indicador de temperatura de aceite míralo también.
- Debes cambiar la correa de distribución: Muchos coches suelen ir al desguace por rotura de la correa de la distribución. El cambio no es barato, costando a partir de unos 300 euros, pero siempre se debe hacer el cambio de la bomba de agua. El precio es algo más alto (unos 100 euros) y así te puedes asegurar que no tendrás problemas en 80.000 kilómetros.
- El mantenimiento periódicamente: Realizar un mantenimiento óptimo es una parte fundamental para que el coche pueda realizar muchos kilómetros. Cambiaremos el aceite cuando lo indique el fabricante, no debiendo olvidar otros líquidos como el de frenos o refrigerante. Recomendamos revisar el estado del filtro del aire, ya que nuestro coche respirar por allí.
- Evitaremos los derrapajes y frenazos bruscos: No es bueno para tu coche y además, si conduces de manera agresiva se pueden desgastar antes los elementos de tu coche, sufriendo más la suspensión o los frenos.
- Intenta lavar tu coche con frecuencia: La sal que se suele esparcir en invierno por las carreteras puede ser uno de los elementos para que puede aparecer la corrosión, esto en los lugares invernales, en la costa el agua del mar tampoco ayuda a que se conserve bien el coche.
- Revisión de los niveles antes de realizar un viaje: En caso de que tengas que realizar un viaje, especialmente en verano, abre el capó de tu vehículo y mira a los niveles de refrigerante y líquido de frenos, además debes comprobar que los manguitos del radiador se encuentren en buen estado. Uno de los mayores enemigos para tu motor es un calentón que puede provocar que se rompa la junta de culata, por lo que deberás revisar la presión de los neumáticos.