Cuando se quiera comprar un coche de segunda mano, no debes tener miedo a parecer insistente, es bueno y lógico comprobar el motor, la carrocería, los interiores o la documentación del coche. Recuerda que el coche antiguo que esté recién pintado, es posible que oculta una carrocería bastante castigada.
La adquisición de un coche de segunda mano es similar a lanzar una moneda al aire, puesto que unas veces sale cara y otras cruz. Cuando toca cambiar de coche y no se quiere invertir en uno nuevo, se pueden seguir una serie de consejos para que el azar se ponga de nuestra parte.
Uso y procedencia
El primer paso que hay que dar es saber cómo se usó el vehículo hasta este momento y qué tipo de trayectos han sido los más habituales. En nuestra opinión, lo mejor son los coches de renting, pues suelen tener siempre un mantenimiento bueno.
Los vehículos con pocos años, que todavía no precisan de demasiados pasos por el taller y que necesitan el típico cambio de frenos, embrague o correa.
Carrocería
Se hace necesario revisar de la mejor de las maneras los golpes o el estado de la pintura. Siempre es bueno alejarse y ver el coche de forma detenida, algo que aconsejan los expertos en coches de segunda mano de smmotor.es, ya que así vas a poder notar los distintos tonos de color que puede haber entre algunos paneles de la carrocería.
Todo ello puede terminar indicando que ha recibido algún tipo de golpe y que se tuvo que volver a pintar. Más allá de la estética, es posible que haya afectado a alguna parte del interior.
Los bajos
Deberás agacharte y vigilar si existe óxido en los bajos. Si es así, va a ser porque el vehículo sea procedente de zonas de costa o de sitios en los que haya temperaturas reducidas donde lo normal es que se eche agua con sal a las carreteras. Además de lo que se ve a simple vista, es posible que queden afectados algunos de los componentes a nivel de mecánica de la zona baja.
Interior
No debes conformarte con que el coche vaya a ser confortable. Por todo ello es necesario prestar atención y comprobar que todos los botones vayan a funcionar como corresponda. En el caso de que alguno falle, es posible que se deba a una mala conexión de los fusibles o que el sistema que controle alguno vaya a estar averiado.
Debajo el capó, el misterio
Puede que seas como el 95% de la población y que cuando levantes el capó solo vas a ver tubos y cables de tal forma que no sepas lo que signifiquen.
De todas maneras, existen puntos que pueden darte una serie de pistas. Por todo ello, lo mejor es que revises los niveles de aceite, líquido anticongelante y limpiacristales, así como vigilar que la batería no tenga óxido en los bornes.
No tiene que ser negativo para el coche, pero sí que va a demostrar descuido por parte de los anteriores propietarios.
Otro de los puntos que se pueden comprobar es la tornillería. En el caso de que haya marcas importantes de manipulación, vas a saber que el vehículo necesitará alguna reparación importante.
Comportamiento
Hay que probar el vehículo en ciudad y carretera. Es necesario cómo responde ante las situaciones convencionales de tráfico y deberemos quedar contento de las reacciones. No debe dar tirones ni que se produzcan pérdidas de potencia o vibraciones del motor.
Si te vas a comprar un coche de segunda mano, no se puede ir temeroso de que nos vaya a dejar tirado en cualquier momento.
Mantenimiento
Es fundamental conocer bien el estado donde el vehículo se encuentre desde su salida del concesionario, y no solo del actual.
Por todo ello, se debe verificar que el libro de mantenimiento tenga los sellos que se hagan después de cada revisión y que se hayan hecho en instalaciones profesionales. Las reparaciones no se pueden hacer en cualquier lugar.
Contrato de compraventa
Antes de comenzar los papeleos, se recomienda solicitar un informe sobre cómo está la situación del vehículo porque vaya a tener multas o facturas del taller que estén pendientes de pago.
Después se deberá firmar un contrato de compraventa entre las partes. Para ello habrá descargar en la red de redes un contrato tipo y solo habrá que rellenar los datos del comprador y vendedor, así como los del coche.
No olvides que cuando se compra un coche a un particular, debes tener también garantía. Ello te va a cubrir durante seis meses, siempre que en caso de fallo se demuestre que el mismo se produzca un defecto del automóvil y no por el uso que se le de.